Empresas sostenibles: ¿por dónde empezar?
La sostenibilidad ambiental en las industrias se ha transformado de tema debatible a obligación. Los materiales disponibles en el mundo no son ilimitados, pero la necesidad que tenemos de estos sí que lo es. ¿La respuesta? Las empresas sostenibles.
¿Qué son las empresas sostenibles?
La sostenibilidad ambiental en el sector empresarial nos garantiza la mayor mantenibilidad de las prácticas de la compañía. Esta trata de que las actividades humanas e industriales tengan como unos de sus principales objetivos de forma indefinida la conservación y protección del medio ambiente.
Desde hace décadas se ha demostrado que los recursos disponibles en el mundo son limitados. De forma que, si no se reciclan y reúsan, las prácticas industriales tendrían una fecha de caducidad relativamente próxima.
El desarrollo sostenible se basa en la garantía del desarrollo económico, teniendo en cuenta por una parte los aspectos sociales y la protección del medio ambiente. De forma que se satisfagan las necesidades del presente, sin poner en peligro las posibilidades del futuro. Entre las prácticas más comunes se encuentran:
- El ahorro de energías.
- El consumo de recursos de forma responsable.
- El reciclaje de materiales.
Obligaciones de las empresas hacia la sostenibilidad
El desarrollo sostenible básico de las empresas en España es garantizado por algunas leyes sobre residuos y legislaciones mayoritariamente provenientes del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico. Entre estas encontramos:
- LEY 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular.
- REAL DECRETO 208/2022, de 22 de marzo, sobre las garantías financieras en materia de residuos.
- REAL DECRETO 952/1997, por el que se modifica el Reglamento para la ejecución de la Ley 20/1986 Básica de Residuos Tóxicos y Peligrosos. Este reglamento se aprobó mediante Real Decreto 833/1988 de 20 de julio.
Acciones sostenibles para implementar en las empresas
Para promover el desarrollo sostenible existen iniciativas como la Semana Europea de Desarrollo Sostenible, la cual se celebró este pasado 18 de septiembre al 8 de octubre. En estos eventos se fomentan iniciativas para poner en práctica el desarrollo sostenible de las empresas europeas.
Por otro lado, tenemos también la Semana Europea de la Reducción de los Desechos, que se basa en crear concienciación sobre la gestión sostenible de los recursos. Esta se fundamenta en acciones sostenibles tales como reducir los residuos. reutilizar los productos y reciclar materiales.
Existen acreditaciones, como el certificado ODS, que tienen como objetivo demostrar que las empresas promueven la sostenibilidad en ella. Lograr uno de esto puede acarrear ventajas como la posibilidad de abrirte a más mercados, ahorro en costes, contratos con el sector público o la mejora de la imagen de marca. Para lograr estos títulos y/o que una compañía sea considerada una empresa sostenible, la ODS se basa en la Agenda 2030 sobre el desarrollo sostenible la cual plantea 17 objetivos principales a cumplir. Entre estos, los que pueden tener más efecto directo en compañías son:
- ODS 3: Garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades.
- ODS 7: Garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna.
- ODS 8: Promover el crecimiento económico inclusivo y sostenible, el empleo y el trabajo decente para todos.
- ODS 9: Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y fomentar la innovación.
- ODS 12: Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles.
- ODS 13: Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
Para cumplir objetivos como el Objetivo de Desarrollo Sostenible 12 sobre producción y consumo responsables, un ejemplo muy claro, es empezar por el uso de materiales reciclados, como se ha comentado previamente. Para ello se creó la plataforma de ScrapAd, para la compra de chatarra y venta de materiales reciclables. Esta además de abrir la posibilidad de un mayor mercado, con precios más competitivos, tiene ventajas como mayor facilidad y seguridad en el proceso de compraventa.